En este blog escribiré sobre diferentes deportes: Fórmula 1, bàsquet, fútbol, etc. Des de siempre me encanta el deporte y por eso quiero compartir redactando notícias, crónicas y impresiones propias sobre aquello que tanto me apasiona.
Todo lo negativo -presión, desafíos- es una oportunidad para crecer.
— Kobe Bryant.
Esta es mi primera publicación. Iré escribiendo sobre diferentes acontecimientos deportivos cotidianamente, así que estad atentos. Podéis suscribiros aquí abajo si os gusta el contenido y recibiréis una simple notificacón para leer directamente nuevas publicaciones que subiré próximamente.
Este fin de semana del 3,4 i 5 de Agosto la fórmula 1 viajaba a Mogyoród (Budapest, Hungría), ciudad más conocida por acoger otro fin de semana a todas las escuderías junto con los miles de apasionados del motor en una cita más del calendario en el mítico circuito de Hungaroring. Hablamos de un circuito donde el adelantamiento es más difícil de lo que parece a pesar de que posee dos zonas donde está permitida la activación del DRS, las dos situadas en el primer sector. Estas son, prácticamente, las dos únicas zonas donde el adelantamiento, en condiciones normales, es posible ya que al salir de la curva tres las condiciones no son las más adecuadas para intentarlo. La alta velocidad, el poco espacio y la poca carga aerodinámica que existe en las siguientes curvas provocan que aquel que tenga la posición ganada acabará la vuelta conservando esta misma.
Las espectativas para este gran premio eran muy altas después de ver unas últimas carreras de ensueño, de aquellas que hacía tiempo que no habíamos podido disfrutar. A pesar de que muchos creían que no podría estar a la altura, había ciertos aspectos que indicaba que se nos avecinaba una carrera cuanto menos entretenida. Los Ferrari con diferentes problemas en los anteriores gran premios eran los más rápidos en el primer sector con mucha carga aerodinámica pero excesivamente lentos en el resto de sectores donde encontrábamos las curvas más lentas. Todo lo contrario con los monoplazas de Red Bull que dominaban mayoritariamente los dos últimos sectores. Los Mercedes, en su línea, eran rápidos en cualquiera de los tres sectores y, un fin de semana más, eran los favoritos para llevarse el mayor número de puntos y firmar su octavo doblete.
Llegó el Sábado y nos esperaba una emocionante fase de clasificación donde veríamos si los Ferrari podrían plantar cara o, simplemente, se jugarían la pole los pilotos de Mercedes y Red Bull. De momento, la Q1 no empezó de la mejor manera para la escudería italiana, después de que Charles Leclerc hiciera un trompo y se fuera contra el muro en la última curva del circuito. Por suerte, los daños no fueron de alta gravedad y el piloto ya había marcado un tiempo suficientemente alto como para acceder a la Q2. Eso sí, los mecánicos de Ferrari tenían mucha faena e iban a contrareloj. Sin más sorpresas y incidentes en la primera fase, salvo la eliminación del Renault de Daniel Ricciardo que partiría desde la decimoctava posición. En la Q2, caía otro Renault consagrando un fin de semana poco favorable para los galos Y Leclerc conseguía llegar a tiempo para entrar en la tercera fase salvando, así, la papeleta para los «Tifosi». En esta fase, poco más que añadir, ningún hecho determinante que destacar, excepto el gran trabajo de Carlos Sainz clasificándose de nuevo para pelear con los más rápidos en la Q3. Comenzaba la última y definitiva fase y todos salían de «box» para marcar su primer tiempo. Parecía que ninguno de los Ferrari podría plantar cara a los Mercedes y los Red Bull por la pole y Max se ponía en cabeza momentániamente. Hamilton y Bottas eran los únicos que podían arrebatarle la pole al holandés pero, a pesar de que fueron muy rápidos, no fueron capaces de ello y Max Verstappen lograba la primera pole de su carrera.
El joven holandés tenía una gran oportunidad de llevarse el triunfo partiendo desde la primera fila de la parrilla pero los dos Mercedes que le precedían estaban ansiosos por disputarle la carrera y aguarle la fiesta al piloto de Red Bull. Llegó la hora que todos los aficionados esperan con mucha impaciencia, la hora en la que empieza una batalla entre 20 pilotos para llegar a lo más alto, llegó la hora de que se apagasen los cinco semáforos y empezara el verdadero espectáculo, la carrera. Verstappen no debía cometer ningún error en la salida como le sucedió en Alemania si quería aguardar la primera posición. Pudo con la presión y aguantó cerrando al Mercedes de Lewis Hamilton que se lanzó a morder al holandés. Bottas se emparejó con el británico en la salida de la primera curva, pero Lewis se lanzó por el exterior de la segunda ganando el interior para la tercera y adelantándo al finlandés en una maniobra espectacular. Valtteri salió perjudicado de la pugna y llegó a tocarse con Leclerc perdiendo velocidad por un daño en su alerón delantero. Bottas perdía posición con los Ferrari y estaba frenando a Sainz ya que no entraba en boxes. Finalmente lo hizo y cayó hasta el último puesto.
Verstappen tiraba y se separaba del grupo pero Hamilton le seguía muy de cerca pero no lograba entrar en la ventana de DRS para intentar el adelantamiento. LLegados a la vuelta 26, Max paró en boxes y Hamilton se puso líder buscando un «overcut» ganando distància respecto al Red Bull para salir delante de él en su parada en boxes. Hamilton exprimió su monoplaza pero los tiempos de Verstappen eran mucho mejores. Por esta razón, Hamilton paró lo antes posible para no perder comba y salir cerca de él. A pesar de rodar más lento salió muy cerca del alerón trasero del monoplaza de Max y tras unas vueltas logró colocarse a menos de un segundo. Hamilton no se lo pensó dos veces y le tiró el coche en la primera curva. Max le cerró muy bien la puerta pero llegaron a la segunda, prácticamente, con los dos monoplazas en paralelo, pero Verstappen mantuvo la posición. El británico no había dicho su última palabra y se tiró en la subida a la cuarta curva donde la velocidad es muy alta y es muy arriesgado adelantar. Este se volvió a poner en paralelo, pero no pudo mantener la trazada y se fue largo fuera del circuito. El Red Bull ganaba unos segundos para coger un poco de aire. Mientras, los dos Ferrari luchaban entre ellos con diferentes estrategias para ganar su partda personal y Vettle bastante lejos pero con neumáticos nuevos le recortaba varios segundos por vuelta a Charles Leclerc. Carlos rodaba quinto seguido del Red Bull de Gasly que no era capaz de adelantarlo ante las contínuas defensas del piloto madrileño de Maclaren.
La batalla por el primer puesto continuaba pero sin éxito para el británico hasta que, a falta de veinte vueltas para el final, decidió entrar en boxes y calzar neumáticos blandos. Todo el mundo se quedó sorprendido por esa desición y no entendían que teniendo a Max a poco más de un segundo decidiera parar para ahora tenerlo a veinte segundos. El equipo de Mercedes sabía perfectamente lo que se hacían y, a pesar de que Lewis Hamilton no las tenía todas de que esa hubiese sido una buena decisión, solo le quedaba apretar todo lo posible para intentar atrapar al holandés. Las vueltas iban pasando y el mercedes de Lewis iba pintando de morado, prácticamente cada vuelta y cada vez se acercaba más al Red Bull de Verstappen. Le recortaba más de un segundo por vuelta ya que los neumáticos del cabeza de carrera cada vez estaban más desgastados. Quedaban cinco vueltas y Max ya veía por el retrovisor al británico que se encontraba solamente a tres segundos. Tenía los neumáticos destrozados y tenía al británico presionándole cada vez con más insistencia. La diferencia de gomas era tan grande que Hamilton a falta de cuatro vueltas del final le arrancó las pegatinas a Max y se colocó líder de la carrera después de un adelantamiento, sin complicaciones, por el exterior en la primera curva del circuito. Después de mucho sufrimiento para Mercedes, su estrategia se cumplía y ahora lideraban la carrera. Por otra parte, Carlos seguía defendiéndose con uñas y dientes de Gasly que no encontraba la manera de arrebatarle el quinto puesto. Vettel había logrado alcanzar a Leclerc y se había colocado en tercer lugar cerrando el podio. Bottas desde la última posición había remontado hasta el octavo puesto doblado por la cabeza de carrera.
Finalmente, se mostró la bandera de cuadros para Hamilton ganando una carrera muy trabajada por, absolutamente, todo el equipo de Mercedes. Una estrategia muy arriesgada pero muy bien cortejada por la escudería alemana y que se acaba llevando la victoria en Hungría. Ya saben como dice el dicho: «Quien no arriesga no gana», en Mercedes no tenían nada que perder, arriesgaron y se alzaron con el triunfo. Carrerón también, una vez más, de Max Verstappen que no pudo hacer más logrando el segundo puesto después de liderar gran parte de la carrera y Sebastian Vettel que, muy lejos del nivel de Mercedes y RedBull, le había ganado la partida a su compañero de equipo Charles Leclerc. Una carrera diferente a las que veníamos viendo en los últimos gran premios, pero otra carrera más que nos deja asombrado y con ganas de más. Una carrera donde la estrategia alza al campeón de Hungaroring que se marcha de vacaciones con los deberes hechos convirtiéndose en más líder que nunca en el campeonato de pilotos y que recibe el nombre de Lewis Hamilton.
El pasado fin de semana se disputó el gran premio de Alemania, en el cual pudimos vivir una de las carreras más locas de los últimos tiempos. Veníamos de dos grandes premios donde habíamos podido disfrutar de la fórmula 1 que verdaderemente nos gusta, con la batalla entre Max Verstappen y Charles Leclerc en el Red Bull Ring de Austria y con la apasionante lucha de los Mercedes en casa del británico Lewis Hamilton que pudo alzar el trofeo desde el escalón más alto del podio.
En el circuito alemán también pudimos vivir grandes batallas y una gran cantidad de adelantamientos sobre el asfalto, después de que los dos ferraris salieran en el último lugar, en el caso de Vettel y en la décima posición el joven Charles Leclerc. por problemas en la fase de clasificación del Sábado. Todo indicaba que estábamos a punto de vivir un «carrerón» con mayúsculas y, a la mañana siguiente, nos despertamos con una previsión meteorológica la cual mostraba que ese factor que añade un tanto por ciento de emoción más, ese factor que iguala las condiciones para todos los pilotos y que a los que amamos a este deporte tanto nos gusta empezó a caer sobre el trazado de Hockenheim.
La lluvia empezó a cubrir de mojado cada sector de dicho circuito y, a medida que avanzaba la mañana, esta no cesaba. Finalmente, tras una larga mañana, llegó la hora del espectáculo, los pilotos tenían la oportunidad de demostrar su técnica de pilotaje y de dar su mejor versión ya que, en condiciones extremas, con cualquier mínimo fallo puedes acabar contra el muro. En esas circunstancias todo podía pasar, y vaya si pasó. Los veinte pilotos calzaban neumáticos de extrema lluvia y tras unas vueltas detrás del Safety Car se dudaba si la salida seria desde la parrilla o a partir de la marcha del SC, pero los pilotos querían empezar desde el principio y así fue. Se apagaron los cinco semáforos y comenzó el espectáculo sobre el deslizante asfalto y bajo la chispeante lluvia de alemania. Hamilton defendía la pole y así lo hizo, no pudo hacer lo mismo Verstappen con el segundo puesto ya que patinó en una de sus peores salidas.
A las pocas vueltas Pérez trompeó y dió entrada al coche de seguridad por primera vez de las muchas que iba a intervenir. Muchos cambiaron a neumáticos medios ya que la lluvia no era intensa. A todo esto, Sebastian Vettel ya era octavo partiendo desde la vigésima posición y Carlos con una salida de pista era último. Todo estaba medio controlado con Hamilton en cabeza pero la locura empezó cuando Magnussen, en la vuelta 23 entró en boxes y pusó los blandos cuando empezaba a llover con más intensidad. A partir de ese momento muchos pilotos como Verstappen y Bottas pararon y pusieron los blandos que se usan en situaciones favorables sin lluvia. En un sector más seco se agarraban bien a la pista y provocaba que fueses más rápido pero en los otros más mojados corrías un gran riesgo que muchos pilotos acabaron pagando con un trompo 360º como el del holandés o el choque contra el muro de Leclerc cuando era más rápido que la cabeza.
Todo iba bien para Hamilton cuando, segundos después del abandono de Leclerc, su coche patinó y fue contra el muro perdiendo el alerón delantero. Consiguió entrar al box irreglamentariamente recibiendo una sanción de cinco segundos y más que perdió ya que su equipo no estaba preparado para el cambio, provocando que cayera hasta la quinta posición. Todo esto sucedió en solo media carrera y ahora Verstappen se escapaba y Hulkenberg era segundo buscando su primer podio en la F1, hasta que se encontró, al igual que muchos otros, con el muro que le impidió seguir. Con la salida del SC, Stroll experimentó poniendo los blandos de nuevo y le salió bien ya que su rendimiento mejoró y, vueltas después, todos menos Hamilton los pusieron también, situación que lo ponía líder de la carrera hasta que llegó de nuevo Verstappen. Hamilton cayó hasta la duodécima posición después de sufrir otra salida de pista.
Quedaban solamente 10 vueltas y Max lideraba seguidos de Kvyat y Stroll. Todo parecía medianamente estabilizado pero Bottas que rodaba en cuarto lugar patinó por encima del piano y el muro se cobró una víctima más. Salió por última vez el SC y Sainz obtuvo el cuarto lugar perseguido de Vettel que le arrebató la posición en cuanto este abandonó la pista y incluso tuvo tiempo de colocarse segundo adelantando a Stroll y Kviat concluyendo una de las remontadas más históricas que se han vivido en la fórmula 1, llegando a ganar 19 posiciones en una carrera.
Finalmente, el joven holandés vio la bandera a cuadros con su Red Bull consiguiendo su segunda victoria esta temporada. Seguido del piloto alemán de Ferrari que demostró porqué tiene cinco campeonatos del mundo y de Kvyat que logró el segundo podio de Toro Rosso en todo su recorrido deportivo. En fin, una carrera donde la lluvia lo revolucionó todo y la cual dió oportunidades a conseguir puntos a aquellos que no estan acostumbrados. Sin duda el mejor gran premio de la temporada en el que ganaron más aquellos que no cometieron tantos errores, también el que puso a mil los corazones de todos aquellos que les gusta la F1 y en el que el joven Verstappen fue el más maduro ,y por eso, se llevó la victoria.
La F1 está de vuelta para hacernos vibrar un año más. Tras las vacaciones de invierno la competición de carreras de coches más laureada en todo el mundo arrancará este 17 de Marzo, un año más en la ciudad de Melbourne, Australia. En el vigente curso podremos disfrutar de 21 carreras que se disputarán en diferentes escenarios del mundo donde 20 pilotos lucharán para llevarse todos y cada uno de los puntos en juego para llegar a coronarse como campeón del mundo en la categoría reina.
Se producen movimientos y aparecen algunos cambios para la siguiente temporada, tanto en escuderías como en las filas de estas mismas, nuevas marcas se hacen un puesto en el mundo de las carreras, como la escudería italiana de Alfa Romeo asociándose con los Sauber o los Racing Point que sustituyen a los Force India después de la compra de esta escudería por parte del padre del piloto canadiense Lance Stroll. Jóvenes talentos se hacen un hueco en la Fórmula 1 como Lando Norris para Maclaren, Antonio Giovinazzi defendiendo a Alfa Romeo, Alexander Albon en Toro Rosso y George Russell luchando para Williams e intentarán demostrar lo que valen para lograr atraer a grandes escuderías como han hecho Charles Leclerc y Pierre Gasly que pasarán a correr para Ferrari y Red Bull para disputarse el campeonato contra las consolidadas estrellas de este deporte.
Los cuatro debutantes en la F1 para demostrar que merecen su puesto.
La parrilla de la próxima temporada estará formada por veinte pilotos, algunas caras nuevas, otras de más conocidas pero todos con un mismo objetivo: llegar a lograr el campeonato del mundo tarde o temprano. Los pilotos de Mercedes tienen el papel de favoritos, después del absoluto dominio en los últimos cinco años. Hamilton defiende el título y buscará revalidarlo por sexta vez. Valtteri Bottas dejará de ser su escudero e intentará arrebatárselo y coronarse por primera vez en esta categoría. Los Ferrari irán en busca de su oportunidad aferrándose a ella para disputar el campeonato a los «Silver cars», al igual que los Red Bull con el joven alocado Max Verstappen que lo da todo para lograr lo que se propone. Todos con muchas ganas de correr y luchar en aquel sitio que más quieren y que, prácticamente, pueden considerarlo su casa: el asfalto.
CIRCUITOS A DESTACAR
Bahrein
El circuito de Sakhir es uno de los más característicos y bonitos de la temporada donde los pilotos pueden arriesgar debido al espacio entre el asfalto y los muros.
Azerbayán
Este escenario ubicado en Bakú, se disputa en el mismo centro de la ciudad pasando por la parte antigua. Un escenario muy agradable pero que no permite error alguno; los muros no perdonan.
Mónaco
Mónaco, el escenario donde todos quieren alzarse con la victoria y celebrarlo por todo lo alto en la ciudad de la riqueza, pero donde es más difícil adelantar y llevarse el triunfo.
Magníficos circuitos en ciudades impresionantes que acogerán por un fin de semana la mayor competición de coches de carreras del mundo, la qual nos deleitará con excitantes grandes premios y nos demostrará semana por semana porqué realmente amamos este deporte.